miércoles, 15 de septiembre de 2010

Día 4. El desencanto de la universidad.

Martes, día en el que debería haber visto a mi coordinadora. Quedo con Elena para ir juntas, y al llegar a la universidad y a su despacho, nos larga diciéndonos que no tiene tiempo, que nos veíamos el jueves, y que está todo en internet. En internet no hay casi nada, y las clases han empezado. A este ritmo empiezo las clases en octubre.
Por la tarde quedada con Gaëna y sus amigos Jeremy y Clément, super simpáticos los tres. Dimos una vuelta, fuimos a correos y a comprarme el móvil y el bono para el tren, y compramos un granizado que no estaba muy especial pero se podía beber. Por la noche matada a ver asignaturas y a intentar cuadrarlas, sin éxito. A las dos me acosté con ganas de incendiar la universidad.

2 comentarios:

  1. Yo te alento a quemar aquello y a huir del pais, concretamente para acá, que se te echa de menos xD
    Ya se que esto no es Mexico... pero tampoco estás para ponerte exigente con tus huidas...
    Yo ya te he dicho lo que tienes que decirle a tu coordinadora :3

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  2. Yo tengo la teoría de que las secretarías de las universidades son como las cucarachas: sobrevivirían a un ataque nucelar.

    P.D: puedo comentarte, puedo comentarte!!

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